Internacional. Los fondos se utilizarán para inversiones adicionales en el desarrollo de vehículos eléctricos a batería.
Para respaldar sus inversiones continuas en electrificación, Scania emitió otro bono verde, esta vez por un total de SEK 3.000 millones (aproximadamente 285 dólares).
Los ingresos se utilizarán para inversiones adicionales en el desarrollo de vehículos eléctricos a batería. Scania dice que el gran interés en el bono muestra que el mercado de capitales respalda activamente el propósito de Scania de impulsar el cambio hacia un sistema de transporte sostenible.
Scania emitió un segundo bono verde, como parte de los esfuerzos de la compañía para profundizar su inversión en tecnologías de electrificación.
En 2020, Scania se convirtió en el primer fabricante de vehículos comerciales pesados en recibir la aprobación de su marco para la emisión de bonos verdes, y las ganancias de su primer bono se invirtieron en la fábrica de baterías de la empresa y en el desarrollo de vehículos eléctricos a batería.
Alrededor de 20 bancos nórdicos, compañías de seguros y administradoras de fondos de pensiones participaron en la licitación del nuevo bono verde de Scania.
Los ingresos se canalizarán a proyectos que tendrán un profundo impacto en la reducción de las emisiones de CO2 y financiarán la investigación y el desarrollo continuos de vehículos eléctricos de batería de Scania.
“El desarrollo que vemos, donde la comunidad financiera está participando en impulsar el cambio hacia transportes sostenibles, es tranquilizador. Creemos que el interés en la inversión verde necesaria para eliminar gradualmente la dependencia de los combustibles fósiles en el mundo seguirá creciendo”, asegura el director financiero de Scania, Jonas Rickberg.
El mundo se encuentra en medio de una crisis energética, pero la inversión a largo plazo en infraestructura de carga de electrificación sigue siendo vital, pues mayores volúmenes de vehículos eléctricos a batería en el futuro permitirán un transporte libre de combustibles fósiles.
“La necesidad de inversión para asegurar la transición al transporte libre de combustibles fósiles es enorme. Usaremos el bono verde para la inversión continua en electrificación, pues se espera que los vehículos eléctricos a batería constituyan la mitad de nuestras ventas en 2030”, explica Rickberg.
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